Cada 24 de marzo, el mundo conmemora el Día Mundial de la Tuberculosis, una fecha dedicada a concientizar sobre el impacto de esta enfermedad y una invitación para unir todos los esfuerzos hasta lograr erradicarla. En 2025, el lema «¡Sí! Podemos poner fin a la tuberculosis: comprometerse, invertir, cumplir» resalta la necesidad de acción global para acelerar los avances en su prevención y tratamiento.
La tuberculosis en cifras
En Colombia, la lucha contra esta enfermedad sigue siendo una prioridad. En el 2024, el programa de tuberculosis del Hospital Raúl Orejuela Bueno atendió a 77 pacientes, de los cuales el 90% fueron diagnosticados con tuberculosis pulmonar. De estos casos:
- El 55% correspondió a adultos y el 32% a jóvenes.
- El 73% de los pacientes diagnosticados fueron hombres.
- En cuanto al aseguramiento, el 58% está afiliado a Emssanar, el 10% a Nueva EPS, el 10% sin aseguramiento y el 22% pertenece a otras aseguradoras.
- La mayoría de los casos (74%) se concentraron en las comunas 1, 3, 4 y 7, siendo la comuna 1 la más afectada con el 40% de los reportes.
Avances y logros
Gracias a un trabajo comprometido y estrategias efectivas, el programa de tuberculosis del hospital ha logrado:
- Una tasa de éxito del 76,66%, con proyección al 87%, en la condición de egreso de los pacientes atendidos, reflejando el impacto positivo de las intervenciones.
La pasión por cuidar de nuestros ciudadanos nos llevó a implementar algoritmos diagnósticos innovadores dentro del programa de tuberculosis, permitiendo mejorar la detección y el tratamiento de la enfermedad. Este logro nos hizo merecedores de un reconocimiento por parte de la Secretaría de Salud Departamental, reafirmando nuestro compromiso con la excelencia en la atención médica.
Una misión de todos
Para poner fin a la tuberculosis, es fundamental reforzar el rol de las autoridades, garantizar la inversión en programas de salud pública y cumplir con las estrategias establecidas. La detección temprana, el tratamiento completo y el abordaje de factores sociales como la pobreza y la desnutrición son clave en esta lucha.
Desde el HROB, reafirmamos nuestro compromiso con la salud de la comunidad, promoviendo el diagnóstico oportuno y el acceso a tratamientos efectivos. ¡Juntos podemos poner fin a la tuberculosis!